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Gestoras y empresas continúan reforzando sus compromisos climáticos antes de la COP 26. Además, llegan nuevos bonos verdes al mercado español

La financiación sostenible crece. Foto de Scott Graham en Unsplash

La carrera hacia la COP está acelerando los compromisos de la industria de la inversión y de las cotizadas con el Acuerdo de París. El mercado de bonos verdes español continúa creciendo en emisiones.

SBTI aprueba los objetivos de reducción de emisiones de Sacyr

La Iniciativa Science Based Targets (SBTi) ha aprobado los objetivos de reducción de emisiones de Sacyr basados en la ciencia. Este reconocimiento llega apenas a unos días del inicio de la COP 26.

Sacyr se ha comprometido a reducir las emisiones absolutas de GEI de alcance 1 y 2 en un 42 por ciento y en un 25 por ciento las de alcance 3 en 2030 respecto del año base 2020. El alcance 3 incluye la compra de bienes y servicios, actividades relacionadas con combustibles y energía, residuos generados en operaciones e inversiones.

Los objetivos de reducción de emisiones establecidos por Sacyr se encuentran en línea con lo que la ciencia climática considera necesario para que el calentamiento global no exceda de 1,5ºC respecto a niveles preindustriales para los alcances 1 y 2, y se establece un objetivo de “well below 2ºC” para el alcance 3.

El presidente de Sacyr, Manuel Manrique, señaló que la aprobación por parte de SBTi de los objetivos marcados “refrenda el firme compromiso de la empresa contra el cambio climático”.

“En Sacyr nos hemos fijado una de las metas más ambiciosas de nuestro sector, alineada con el objetivo de que el calentamiento global no supere los 1,5ºC, tal como establece el compromiso de Business Ambition de Naciones Unidas. Para ello, hemos definido una sólida hoja de ruta que nos permitirá reducir significativamente tanto nuestras emisiones como las de nuestra cadena de valor en los próximos años”, añadió el presidente.

Robeco anuncia objetivos climáticos para 2025 y 2030

Robeco tiene el propósito descarbonizar sus inversiones un 30 por ciento para 2025 y un 50 por ciento para 2030. Con su trayectoria de descarbonización de aproximadamente un 7 por ciento anual, es probable que Robeco se mueva incluso más rápido que la economía mundial en los próximos años.

Siguiendo los mismos estándares que establece para los demás, Robeco también aplica el objetivo de alcanzar el cero neto para 2050 a sus propias operaciones. Su objetivo es reducir sus emisiones operativas un 35 por ciento para 2025 y un 50 por ciento para 2030. Esto abarca todas las emisiones asociadas con los viajes de negocios, la electricidad, la calefacción y otras actividades comerciales.

La firma acelerará la transición energética invirtiendo en empresas que prosperarán en dicho movimiento

Robeco acelerará la transición invirtiendo en empresas en las que cree que prosperarán en la transición, y comprometiéndose de forma activa con aquellas que no se muevan lo suficientemente rápido.

Esto significa que Robeco intensificará sus actividades de propiedad activa mediante la votación y el compromiso con los 200 emisores principales en su universo de inversión y se centrará en participar en el cambio climático con 55 empresas que son responsables del 20 por ciento de las emisiones de la cartera.

Además, Robeco intensificará sus diálogos con los emisores de bonos soberanos y, junto con otros inversores, pedirá que los países adopten medidas climáticas, ya que los gobiernos desempeñan un papel fundamental en la transición ‘net zero’.

LAR ESPAÑA coloca una segunda emisión de bonos verdes

La socimi Lar España ha colocado esta semana una emisión de bonos verdes senior no garantizados con vencimiento en noviembre de 2028, en la que ha obtenido el máximo previsto de 300 millones de euros con una sobredemanda de cinco veces.

La actual emisión sucede y completa la previa emisión de bonos seniors no garantizados realizada en julio de este mismo año, en la que la compañía obtuvo 400 millones de euros más. 

La colocación se ha cerrado entre inversores institucionales con una sobredemanda  de cinco veces y un cupón del 1,84 por ciento.

Fidelity reducirá el 50% de las emisiones de su cartera hasta 2030

Fidelity International (Fidelity) ha presentado esta semana una versión mejorada de su política de inversión en torno al cambio climático, que alinea su estrategia de gestión de inversiones activa y a largo plazo con el objetivo de cero emisiones netas en el futuro.

Sobre la base de su compromiso como miembro fundador de la Net Zero Asset Manager Initiative, que persigue lograr las cero emisiones netas en 2050, Fidelity se ha comprometido a conseguir en 2030 una reducción del 50 por ciento de las emisiones de CO2 en toda su cartera con respecto a los niveles de referencia de 2020.

Para guiar este proceso, Fidelity pondrá en marcha una metodología de Calificaciones Climáticas Propias. Éstas se nutren de los recursos de análisis de Fidelity para evaluar la ambición de las empresas en las que invierte de alcanzar las cero emisiones netas, y se utilizará para ir estableciendo objetivos intermedios en el camino hacia las cero emisiones netas de sus fondos.

Junto con la mejora de las prácticas de voto anunciada este verano para que las empresas cumplan unas normas mínimas en materia ESG, esta política animará a las compañías a reducir su impacto en el planeta y a aportar valor a todas las partes interesadas en un mundo que se está descarbonizando.

En verano, Fidelity ya anunció una mejora en sus prácticas de voto

“Como inversores responsables, creemos que debemos hacernos cargo de la huella de carbono de las carteras que gestionamos y trabajar con las empresas en que invertimos para reducir las emisiones en consonancia con los objetivos internacionales de neutralidad en emisiones de carbono”, apunta Jenn-Hui Tan, responsable global de Supervisión e Inversión Sostenible de Fidelity International.

«Fidelity invierte en muchas de las principales empresas del mundo y queremos utilizar nuestra influencia como administradores activos de capital para ayudar al mundo a cumplir sus objetivos climáticos. Esta política a largo plazo, impulsada por el compromiso, tiene como objetivo hacer que las empresas rindan cuentas de su huella de carbono y garantizar que unos mercados públicos transparentes sean una fuerza poderosa para la descarbonización», añade.

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