El mercado tiene hambre de deuda verde española con diversidad de plazos

AXA IM, Santander AM, Candriam y Eurizon, que han participado en el debut 'verde' del Reino de España, son partidarias de que las próximas emisiones del Tesoro se realicen a distintos plazos

El éxito en la colocación del bono verde español ha marcado el inicio del camino en las emisiones ESG soberanas nacionales. El gran apetito inversor augura una buena acogida en las próximas emisiones del Marco de Bonos Verdes del Reino de España, para las que el mercado ya tiene ciertas expectativas.

Entre los inversores institucionales participantes en el debut de la renta fija soberana verde española, que se desembolsa este martes, la mayoría espera toda una curva con diferentes vencimientos y cupones para el futuro.

SOCIAL INVESTOR ha consultado a los expertos de AXA Investment Managers, Santander Asset Management, Candriam, Eurizon y Pictet AM, y la mayoría es partidaria de una mayor diversidad de emisiones; aunque también hay quien optaría por impulsar la liquidez del tramo que ya está vivo (20 años).

Entre estas gestoras, las cuatro primeras han logrado participado en esta primera emisión de 5.000 millones de euros, que tuvo peticiones de 60.000 millones. Pictet AM no descarta hacerlo en las próximas.

«A medio plazo, sin duda, nos gustaría que España desarrollara una curva de bonos verdes como lo está haciendo Alemania, también con vencimientos a 5, 10 y 30 años», señala el responsable global de renta fija de Candriam, Nicolas Forest.

En esta línea, Ella Hoxha, gestora de inversiones del equipo de bonos globales de Pictet AM, señala que «podría ser bueno comenzar a construir posiciones en el futuro, por ejemplo, con vencimientos a 5, 10 y 30 años».

«Damos la bienvenida a las iniciativas de emisores que construyen una curva de bonos verdes en lugar de centrarse en una madurez», añaden desde AXA Investment Managers.

Para algunos de los expertos consultados cobra especial sentido en el plan de deuda ‘verde’ española ir hacia unos periodos más cortos.

Para Carmen Borondo, gestora de Santander Asset Management, esta referencia a 20 años ha sido interesante para incorporar a sus fondos «porque ofrece valor y se esperaba una gran demanda al ser la emisión inaugural», además de contar con el rating más alto en sostenibilidad.

No obstante, para el siguiente tramo la encargada de gestionar la renta fija en la gama de fondos Santander Sostenible, apunta a que un periodo de amortización «inferior a diez años encaja más en la política de inversión de los fondos».

«En este contexto, un bono de vencimiento corto parecería apropiado para el programa de emisión de bonos verdes soberanos españoles», agregan desde AXA IM.

El tramo largo está más cerca del marco temporal de los proyectos de inversión verde

El Tesoro español tiene previsto emitir una serie de bonos verdes de referencia a lo largo del tiempo, que se reabrirán también a través de subastas bimensuales periódicas.

Para Eurizon, lo idóneo es que los bonos verdes emitidos por el gobierno se sitúen en el tramo medio o largo de la curva de rendimiento.

«Este periodo está más cerca del marco temporal de los proyectos de inversión verde en los que invierten», explica Caterina Ottavi, gestora de fondos del equipo de Green & Sustainable Finance de Eurizon.

Acumular volumen en este bono añadiría liquidez

Frente a la construcción de una curva, el Tesoro español también podría optar por emitir nuevos bonos a la misma duración, lo que daría liquidez a este tramo.

Con la colocación de un bono a 20 años se está creando una referencia sobre la que calcular los rendimientos de las emisiones corporativas y poder estimar una prima de riesgo de bono verde.

Para el presidente del Observatorio Español de la Financiación Sostenible (OFISO), Julián Romero, lo más indicado es que se continúe apostando en futuras emisiones por el plazo a 20 años; justo para dotar al bono de suficiente liquidez.

«Su estrategia ha sido lanzar emisiones líquidas, para lo que habitualmente busca acumular emisiones por unos 20.000 millones. Es una manera útil para quitar volatilidad al bono y para dar confianza a los inversores», explicaba Romero.

Para los grandes inversores institucionales la liquidez va a estar bien presente y, por tanto, «sería bueno para mejorarla con mayor acumulación de volumen en este bono, pues su tamaño actual es mucho menor que los soberanos habituales de referencia», según la experta de Pictet.

El bono verde español ha sido la emisión con más sobresuscripción de Europa en la semana

La firma suiza no ha estado involucrado en esta emisión, pero está «familiarizándose con el marco aplicado por el Tesoro español» y podría participar «cuando las valoraciones sean atractivas».

En cualquier caso, parece que el apetito continuará. El elevado nivel de sobresuscripción del bono verde español, de 12 veces el monto emitido, ha sido mayor al de todas las emisiones registradas por el mercado europeo en la última semana, según los datos de Bloomberg.

España todavía tiene margen para emitir alrededor de otros 8.000 millones de euros referenciados a este bono verde, ya que el programa marco presentado en julio había hallado proyectos valorados en más de 13.600 millones de euros en gasto verde elegible.

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