Sánchez y las energéticas entierran diferencias para financiar el hidrógeno verde español

Iberdrola, Repsol, Endesa, Acciona, Naturgy y Enagás realizarán inversiones millonarias mientras el Gobierno compromete 1.500 millones en fondos europeos hasta 2023

Un evento con cuatro ministros, el presidente del Gobierno, los primeros espadas de todos los grandes grupos energéticos españolas, el vicepresidente de la Comisión Europea y la comisaria de Energía.

Ese plantel se convocó este jueves, aunque virtualmente, para destacar las virtudes y el potencial del hidrógeno verde como apuesta de futuro y como activo que puede cambiar el modelo energético español, siempre dependiente de importaciones. Este acto, que no es el primero en el que el Pedro Sánchez se reúne con empresarios, parece que marca un antes y un después, tras los desacuerdos en materia de impuestos, o por el déficit de tarifa que han provocado ciertas tensiones.

Bajo un título que no deja lugar a dudas, ‘El hidrógeno verde: una oportunidad para España’, tanto el Ejecutivo como las compañías se comprometen a realizar una inversión millonaria para apuntalar la producción de hidrógeno como eje de negocio y como base para rebajar las emisiones de CO2 y conseguir que España cumpla el compromiso de neutralidad de emisiones en 2050.

¿Qué es el hidrógeno verde?

Se trata de un combustible, muy ligero, que se produce a través de un proceso denominado electrolisis: con una corriente eléctrica separa el hidrógeno del oxígeno presente en el agua, sin emitir CO2.

Es energía 100% limpia que, además, tiene otros usos, como la fabricación de amoniaco y de fertilizantes verdes, lo que aumenta el potencial. Sin embargo, aún hay problemas clave que dificultan su desarrollo, como el almacenaje.

Y se necesita inversión en volúmenes muy altos. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, prometió 1.500 millones de euros para el desarrollo del hidrógeno verde entre 2021 y 2023. Eso sí, con fondos procedentes de los fondos europeos de recuperación de UE. El desarrollo de este combustible cuadra perfectamente con el impulso a la sostenibilidad que la UE va a exigir para los proyectos que se financien con fondos del NEXT Generation.

«La ‘Estrategia del hidrógeno a 2030’ contempla una inversión de 8.900 millones de euros, entre fondos públicos y privados»

Las cifras previstas para la próxima década son aún más altas, porque el Gobierno aprobó a principios de octubre una ‘Estrategia del hidrógeno a 2030’, que contempla una inversión de 8.900 millones de euros, que no serán todos públicos, porque el propio Sánchez los fía a la colaboración con el sector privado.

Junto a la promesa de Sánchez, la vicepresidenta y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, recordó que un 37% de los 72.000 millones de euros previstos para España en transferencias directas del fondo ‘Next Generation EU’ se dedicarán a la sostenibilidad climática, a la transición a un modelo energético renovable.

“Y la hoja de ruta del hidrógeno verde es uno de los 30 componentes clave de nuestro plan de recuperación, transformación y resiliencia”, ahondó Calviño en la exigencia de impulsar el hidrógeno.

Batería de proyectos empresariales

Al margen de la intervención gubernamental (en la que también estuvieron los ministros de Industria, Ciencia e Innovación; y Transición Ecológica, que organizaba la jornada), el compromiso para desarrollar el hidrógeno queda patente por la apuesta empresarial, tanto de pequeñas compañías, como, sobre todo, de las grandes empresas energéticas del Ibex. Todas, sin excepción se han lanzado al hidrógeno verde como alternativa para impulsar la reconversión renovable de su actividad industrial.

Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol aseguró que el grupo, para el periodo 2021 a 2026, tiene previsto “invertir entre 2.200 y 2900 millones de euros en proyectos de la cadena del hidrógeno”.

Mientras, Iberdrola, a través del proyecto que tiene con Fertiberia para desarrollar fertilizantes verdes a través del hidrógeno, prevé destinar 1.800 millones de euros para la instalación (hasta 2026 o 2027) de 800 MW de electrolizadores. Según adelanto su presidente, Ignacio Galán, contempla crear 4.000 empleos, la mitad para 2023.

“Si queremos hidrógeno tenemos que actuar sobre los costes eléctricos, los costes de transporte y distribución, los peajes”

Josu Jon Imáz, consejero delegado de Repsol

Enagás, por su parte, indicó que, para los tres próximos años, trabaja en 12 proyectos que, entre todos, “podrían mover una inversión de 1.500 millones de euros”, según apuntó su presidente Antonio Llardén. En su caso, con socios, porque va de la mano de Repsol o Acciona. Esta última con un proyecto que aplicará el hidrógeno desde a flotas de autobuses hasta la industria hotelera de Mallorca.

Endesa, Naturgy y Acciona, en esta ocasión no hablaron de cifras concretas. La filial de Enel tiene en marcha 22 proyectos vinculados con el hidrógeno. En su caso y en el de Naturgy, además, van vinculados a ser alternativa a las áreas donde ha cerrado sus plantas de carbón.

Y exigencias de regulación

Las grandes eléctricas aseguran que están “alineadas” con el Gobierno en su apuesta por el hidrógeno, pero también dejaron caer exigencias.

“Necesitamos palancas para hacer esto posible”, aseguró Imaz. “Si queremos hidrógeno tenemos que actuar sobre los costes eléctricos, los costes de transporte y distribución, los peajes”.

“De la misma forma que para desarrollar el vehículo eléctrico no se paga impuesto de hidrocarburos; o el gas natural, para el transporte, tampoco los paga, es absolutamente indispensable un marco de regulación para la transición que permita la descarga de todos los costes de transporte y distribución para hacer posibles estos proyectos del hidrógeno, para hacerlo competitivo en costes”, resumió.

Galán reclamó que Bruselas apueste por el sur de Europa en el desarrollo de este combustible verde. “Le dije a la comisaria [de Energía Kadri] Simson que tiene más sentido invertir en España, con los recursos solares y empresas que tenemos que en el norte de Europa donde hay menos recursos o son más costosos”.

En la misma línea, Imaz auguró que, “en 2030, los costes del hidrógeno verde en España serán un 35% más bajos que en Alemania, por ejemplo”. “España tiene condiciones de desarrollo, lo tenemos analizado, que permiten que la competitividad se anticipe en 5 años a la competitividad que puede desarrollar Alemania. Estamos en el país adecuado”.

«Tiene más sentido invertir en España, con los recursos solares y empresas que tenemos que en el Norte de Europa»

Ignacio Galán, presidente de Iberdrola

“Hay dos problemas”, aseguró José Bogas en cuanto al hidrógeno. “Uno es el de escala; que tiene que ver con el negocio. Hay que apoyar a la industria nacional, a la tecnología española. La segunda barrera es económica, que se debería solucionar con una reglamentación más simple o descargando el coste de la electricidad de una serie de cargas que haga más competitivo el hidrógeno”.

En cambio, Naturgy ve tres problemas. “El primero es el coste eléctrico. El segundo, la disponibilidad de equipos de tamaño suficiente”, en opinión de su presidente, Francisco Reynés.

“El tercero es el marco regulatorio, que se destaque los certificados de origen que aseguren que esto pasa de ser una idea a una realidad con una trazabilidad en toda la cadena de valor”; y que permita diferenciar el hidrógeno que de verdad es verde. Y, ahí, de nuevo, un guiño del Gobierno. “Estamos trabajando en ello, esperamos dar noticias pronto”, prometió la secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen.

Ahora en portada