Con la colaboración de

La estrategia de Argentina para fomentar los activos sostenibles

El regulador del mercado argentino pone en marcha este año una serie de guías sobre inversión responsable como paso previo a la regulación

El regulador del mercado de capitales argentino ha comenzado el año buscando la creación de las bases de buenas prácticas que van ayudar a desarrollar un mercado más sostenible en el país.

En enero, la Comisión Nacional de Valores de Argentina (CNV) presentó un conjunto de guías que se enmarcan el Programa de Finanzas Sostenibles y que tienen el objetivo de concienciar a los actores del mercado de capitales sobre la relevancia de integrar los factores ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) en las decisiones de inversión.

La Comisión presentó tres guías que tratan de las Inversiones Socialmente Responsables, Emisiones de Bonos Verdes, Sostenibles y Sociales y un guía para Evaluadores Externos de Bonos ESG.

Las herramientas constituyen un primer paso para después avanzar con regulaciones concretas enfocadas en generar los incentivos correctos que lleven a los participantes del mercado a incorporar la sostenibilidad en todas las áreas de sus negocios.

Estas tres guías que enmarcan el Programa de Finanzas Sostenibles constituyen un primer paso en regulación

Conforme el mercado se amplíe y surjan herramientas nuevas, los estándares y las exigencias relativos a la inversión socialmente responsable se irán perfeccionando y especificando, a fin de estar en línea con las prácticas internacionales, indica el regulador argentino.

El presidente de la CNV, Adrián Cosentino, destacó el desafío de trabajar la validación de las finanzas verdes dentro de un espacio de la actividad financiera, sobre todo, entendiéndolas como «una actividad de enormes perspectivas de desarrollo en términos de movilizar recursos desde el mercado de capitales hacia proyectos de inversión estratégicos y prioritarios para el crecimiento económico sostenible.»

Argentina se encuentra en una etapa incipiente en la aplicación de las estrategias de inversión responsable, razón por la cual el regulador quiere impulsar el mercado de capitales sustentable y «lo va hacer a través de la educación y la vinculación con distintos sectores y actores estratégicos que permitan el surgimiento de inversores responsables en el país»,  indicó CNV en comunicado oficial.

La iniciativa de Argentina es positiva para poner de manifiesto la intención de ajustarse a las demandas sociales acerca del tema.

Bajo la perspectiva de Fred Seifert, jefe de operaciones para Latinoamérica y Caribe de Sitawi, consultoría especializada en finanzas sostenibles, las guías son importantes por diversos aspectos. Uno de ellos es que el regulador facilita que los agentes de un determinado mercado cumplan con las buenas prácticas, y al seguir dichas prácticas el título va a ser mejor aceptado en el mercado.

«Además de eso, cuando se tiene este conjunto de guías las emisiones de los agentes del mercado estarán más alineadas con las buenas prácticas internacionales, lo que es muy positivo», señala.

Estrategias de inversión responsable

En esa línea, la guía para la Inversión Socialmente Responsable tiene por objetivo informar los alcances, objetivos y ventajas de este tipo de inversión, que es definida como una estrategia de inversión que además de los criterios estrictamente financieros de riesgo, rentabilidad y liquidez, busca promover la integración de los criterios ambientales, sociales y de gobernanza (ESG).

Tanto los inversores institucionales como los minoritarios que deseen armar un portfolio de inversiones responsables, tendrán las siguientes opciones en el mercado local: Bonos SVS – Valores Negociables Sociales, Verdes y Sostenibles.

Este tipo de bonos son instrumentos de deuda cuyos fondos son utilizados para financiar proyectos de impacto medioambiental y social positivo, los cuales suelen contar con una revisión independiente, conocida como revisión externa.

Otra opción de inversión son los bonos verdes sub-soberanos, es decir, bonos locales, a ejemplo de las provincias Jujuy y La Rioja que emitieron los primeros bonos verdes colocados en el mercado internacional en 2017.

Hay también la opción de inversión en certificados de participación o valores fiduciarios en los Fideicomisos Financieros Solidarios, los cuales se constituyen con la exclusiva finalidad de gestionar recursos de financiamiento a ser destinados, de forma directa o indirecta, a entidades y instituciones del sector público nacional, provincial o municipal y que conlleve impacto social.

Otra forma disponible es la inversión el acciones de empresas que voluntariamente cumplen altos estándares de prácticas gobierno corporativo y en acciones de empresas que se encuentren en Índices ESG o de Sostenibilidad.

Por último, los inversores pueden adquirir cuotas partes en Fondos Comunes de Inversión que aplican estrategias de inversión socialmente responsable, es decir son instituciones de inversión colectiva que eligen los activos que conforman su cartera en función de criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo.

Los beneficios de la inversión responsable, según la Comisión, son la maximización de rentabilidades ajustadas por riesgo, es decir, se mejora la gestión de riesgo al considerar los factores ESG, permitiendo la generación de rendimientos sostenibles en el largo plazo.

El segundo punto es la mejora del rendimiento de las carteras de manera coherente con sus obligaciones fiduciarias: y el tercero es ganar la caracterización de un inversor modelo justo en un momento en que la sociedad exige a las compañías un mayor compromiso social.

Las cifras muestran las oportunidades en este sentido. De acuerdo con los Principios de Inversión Responsable, las inversiones con este perfil sumaron más de 103.400 millones de dólares en marzo de 2020.

Ahora en portada