Los pesos pesados del IBEX llegan con los deberes hechos a la nueva meta de emisiones europea

Inditex, Iberdrola, Santander, Amadeus y BBVA han pisado el acelerador con planes propios para reducir su huella de CO2

La Unión Europea no quiere quedarse atrás en la carrera por la eliminar los gases con efecto invernadero y acaba de anunciar un nuevo objetivo de reducción de emisiones de cara a 2030: habrá que recortarlas en un 55%, respecto a los niveles de 1990, frente al objetivo anterior, del 40%.

¿Y están preparadas las grandes compañías cotizadas para cumplir con esta exigencia? A tenor de lo que ocurre con las cinco mayores empresas del IBEX 35 por capitalización, en términos generales llegan con los deberes hechos, aunque aún quede algún que otro fleco por cerrar.

Ven la nueva meta para el final de la presente década con cierta percepción de que pueden lograrla, porque la reducción de emisiones es, prácticamente, una exigencia creciente en casi todos los mercados donde operan.

No sólo es la Unión Europea, el Reino Unido también acaba de acelerar sus planes de transformación verde, a través de un ‘Green New Deal’ que lleva la firma de Boris Johnson.

Y, al otro lado del Atlántico, el presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, ya ha colocado el cambio climático como una de sus primeras prioridades cuando comience su mandato en enero.

Por eso, esa exigencia global, impulsa a las empresas a tomar medidas con más premura de lo que exigen los calendarios.

Valen más de 250.000 millones en bolsa

Las cinco mayores empresas del IBEX 35 por capitalización Inditex, Iberdrola, Santander, Amadeus y BBVA suman un valor en bolsa conjunto de más de 250.000 millones de euros.

Estas empresas pueden marcar el camino a seguir, aunque es cierto que aunque todas persigan la misma meta final (la neutralidad de emisiones contaminantes en 2050) cada una sigue su propio camino.

En ese quinteto de grandes cotizadas están presentes dos bancos: Santander y BBVA. Y ambas entidades apuntan que esa buscada neutralidad de emisiones de CO2 está a la vuelta de la esquina.

Santander y BBVA: objetivo 2020

El banco presidido por Ana Botín explica a SOCIAL INVESTOR que está a punto de ser neutral. Un objetivo que se marcó a finales del año pasado para este 2020 y que conseguirá mediante la compensación de todas las emisiones que genera en su actividad. Entonces, coincidiendo con la COP25, también apuntó que aspiraba a recortar sus emisiones aproximadamente a la mitad entre 2019 y 2025.

Indica, además, que dentro de su compromiso para cumplir con el Acuerdo de París tiene otros tres objetivos. Uno de ellos pasa por conseguir que el 100% de la electricidad que emplea, a nivel global, provenga de fuentes renovables en 2025. Actualmente, indica ese porcentaje es del 60%.

Los dos grandes bancos quieren cerrar 2020 siendo neutrales en emisiones de CO2

Otro está más vinculado a su estrategia de negocio: financiar o facilitar la movilización de 120.000 millones de euros en financiación verde entre 2019 y 2025; y de 220.000 millones de euros entre 2019 y 2030 para combatir el cambio climático. Y el tercero de esos objetivos es eliminar el plástico de un solo uso de todas sus oficinas y edificios en 2021.

En cuanto a BBVA, la entidad encabezada por Carlos Torres Vila también cumplirá con el objetivo de ser neutro en emisiones de CO2 en este 2020. Además, señala que, de cara a 2025, se ha fijado el objetivo de reducir un 68% sus emisiones respecto a 2015 y que el 70% de la energía contratada en todo el mundo sea renovable.

Enmarca estos objetivos en su Compromiso 2025, lanzado para conseguir avanzar en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas y del Acuerdo de París.

Y dentro de esas medidas, por ejemplo, va a asignar un precio interno a sus emisiones de CO2, incorporando ese factor en sus procesos de toma de decisiones. Esto servirá, indica, para que cada área planifique el gasto en CO2 que tendrán sus acciones y acelere en la reducción de emisiones.

Amadeus persigue que las aerolíneas rebajen su huella

Otra de las cinco grandes del IBEX que se ve con los deberes hechos es Amadeus. La compañía tecnológica enfocada en el sector turístico apunta que ya ha conseguido el objetivo de reducción del 55%. “El año pasado, gracias a la utilización de Garantías de Origen de energía renovable redujimos nuestras emisiones de alcance 1 y 2 en un 58%”, detalla Lucas Bobes, responsable global de Sostenibilidad de la compañía.

Además, explica que su trabajo en la reducción de emisiones no es sólo de puertas hacia dentro de la empresa, porque parte de su estrategia es impulsar que sus clientes, sobre todo las aerolíneas, logren reducir el consumo de combustible y, por tanto, sus emisiones.

“Creemos que, en general, hay una oportunidad en la industria de trabajar de manera más eficiente y creemos que tenemos un papel para avanzar en este sentido”, añade Lucas Bobes.

Inditex e Iberdrola, las grandes del selectivo

La segunda mayor del IBEX por capitalización, Iberdrola, está en pleno proceso de transformación hacia un modelo de negocio más renovable y, como derivada de la propia evolución de su actividad, su huella de CO2 va a ir reduciéndose.

La compañía presidida por Ignacio Galán afirma que será neutra en emisiones de carbono, en Europa, en el año 2030 y que, actualmente, sus emisiones de CO2/kWh son ya dos tercios inferiores a la media europea.

A escala global (también opera en mercados como Estados Unidos o Australia) las rebajará en un 86%, hasta los 50g/kWh, al final de esta década. Y, en 2025, se situarán en 70g/kWh. Además, apunta que ya genera el 100% de su energía sin emisiones en países como el Reino Unido, Alemania o Portugal.

Mientras, la grande del Ibex, Inditex, enmarca su compromiso medioambiental dentro de su adhesión al compromiso impulsado por la Oficina de Cambio Climático de las Naciones Unidas, alineado con los objetivos del Acuerdo de París.

Este compromiso, ‘Fashion Industry Charter for Climate Action’, busca que la industria logre las cero emisiones netas para 2050 y un objetivo inicial de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de un 30% para 2030. Meta por debajo del 55% que indica ahora la UE.

Además, la dueña de Zara contempla otras medidas, dentro de ese compromiso del sector de la moda, como la eliminación gradual de calderas de carbón u otras fuentes de carbón para la generación de calor y electricidad en sus propias empresas y proveedores directos.

Esa es, quizás, una de las metas que tienen que perseguir ahora todas las grandes compañías: que no sólo ellas consigan sus objetivos de reducción de huella de carbono, sino también sus proveedores.

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