Foro Social Investor. El IBEX tras la COP 26

Nuria Rodríguez (Naturgy), Lucas Bobes (Amadeus), José Miguel Tudela Olivares (Enagás) y Ana Ribalta (Banco Sabadell) participarán en la mesa inaugural del foro que celebraremos el próximo 16 de noviembre. Hoy nos adelantan algunas de sus argumentaciones

A medida que transcurren jornadas de la COP 26 se reducen los días que faltan para la celebración del Foro Social Investor, organizado por esta publicación en colaboración con Inversión.

Tras las intensas jornadas que se están viviendo en Glasgow el próximo 16 de noviembre, en el Espacio Fundación Telefónica, tendremos la oportunidad de conocer la visión de las empresas del IBEX 35 sobre los retos que supone la descarbonización para su negocio y para la economía española. Todavía puede apuntarse aquí.

En la mesa que abrirá la jornada participarán ejecutivos de Naturgy, Amadeus, Enagás y el Banco Sabadell, que analizarán el impacto de la llegada de los fondos europeos como incentivadores de la competitividad sostenible, o los retos de la gran empresa española en este contexto y el papel de la regulación.

También discutiremos sobre cómo conjugar el cuidado medioambiental con la salida de la crisis. Como un anticipo, SOCIAL INVESTOR ha preguntado a las compañías participantes en el panel cuál es su estrategia en materia medioambiental y cuál es el papel que juega la regulación y estas han sido sus respuestas:

Naturgy

Naturgy quiere ser protagonista de la transición energética a través de cuatro líneas de acción incluidas en el Plan Estratégico 2021-2025: 

  • Impulso de las energías renovables 
  • Descarbonización del negocio de gas a través del desarrollo de los gases renovables, biometano e hidrógeno 
  • Promover la economía circular y la ecoeficiencia a partir de los gases renovables 
  • Proteger la biodiversidad 
Nuria Rodríguez Peinado, directora de medio ambiente y responsabilidad social de Naturgy

Respecto, al entorno normativo, Naturgy explica que una regulación adecuada es siempre sinónimo de confianza para el inversor, pero, que en estos momentos, se necesita ir más allá. «La colaboración público-privada para diseñar las políticas y regulaciones que marquen la transición energética hacia una economía descarbonizada es esencial para hacer frente a los retos que tenemos por delante y alcanzar los objetivos a largo plazo», señalan desde la compañía del IBEX.

Amadeus

Los compromisos de Amadeus se articulan sobre tres pilares:

  • En nuestras operaciones, tenemos la ambición de alcanzar la neutralidad en carbono en 2030; llevamos buen camino, puesto que desde 2018 hemos reducido en más de un 68 por ciento nuestras emisiones de alcance 1 y 2.
  • Ayudar a nuestros clientes a través de nuestras soluciones tecnológicas a que sean más eficientes. Por ejemplo, ayudando a las líneas aéreas a reducir su consumo de combustible.
  • Siendo conscientes de que la sostenibilidad es un reto global, debemos colaborar con otras empresas y asociaciones de nuestra industria para alcanzar objetivos comunes en el área de la descarbonización y de la sostenibilidad en general.
Lucas Bobes, responsable de sostenibilidad y reporting ESG de Amadeus

A la pregunta sobre si las empresas necesitan una regulación y legislación clara para emprender con confianza las inversiones, Bobes responde tajantemente: «Absolutamente, y diría que no solo a nivel nacional, sino a nivel internacional, puesto que se trata de facilitar soluciones para un reto global, no nacional».

Enagás

La urgencia climática está haciendo que gran parte de las compañías estemos no solo fijando compromisos de neutralidad en carbono en el año 2050 (en línea con los compromisos que establece la Unión Europea), sino tratando de acelerarlos y anticiparlos al máximo, revisando para ello nuestro planes de acción.

En 2021, Enagás adelantó su objetivo de ser neutra en carbono al año 2040. «Ya hemos logrado reducir nuestra huella de carbono en un 63 por ciento desde 2014 y somos la única empresa de nuestro sector a nivel mundial que está en la lista A del índice CDP que evalúa el compromiso de las compañías con el cambio climático», señala.

En la cumbre de Glasgow hemos visto como, adicionalmente a los compromisos globales de reducción de emisiones, se ha puesto foco en la reducción de emisiones de metano, firmándose por parte de más de 100 países, impulsado por EE.UU. y la UE, un compromiso de reducción de emisiones de metano de un 30 por ciento en 2030 respecto a los niveles de 2020 («Global Methane Pledge»). 

Enagás lleva ya tiempo trabajando intensamente en ello y ha reducido un 62 por ciento sus emisiones de metano desde 2014. «En 2019 nos adherimos a la iniciativa Global Methane Alliance de Naciones Unidas y adquirimos un compromiso adicional: reducir estas emisiones un 45 por ciento en 2025 y un 60% en 2030 (ambas cifras respecto a 2015)», apunta José Miguel Tudela Olivares, director de organización y sostenibilidad de Enagás.

Para ello, Enagás tiene un detallado plan de acción que incluye medidas para incrementar la mejora de la fiabilidad de los datos. Este enfoque ha sido valorado muy positivamente en el primer informe del Observatorio Internacional de Emisiones de Metano (IMEO) que lidera Naciones Unidas con el apoyo de la Comisión Europea y Enagas ha recibido la calificación de «Gold Standard» para el primer año de implantación. 

José Miguel Tudela Olivares, director de organización y sostenibilidad de Enagás

Respecto a la regulación, José Miguel Tudela Olivares, reconoce que las empresas necesitan para poder invertir «que estén claras las reglas del juego» tanto en materia regulatoria como legislativa y sobre todo, «una certeza sobre la estrategia y los objetivos que se persiguen y cuándo se quieren conseguir», añade. 

«Es crítico alinear los objetivos que se persiguen y la regulación necesaria para poder conseguirlos», asegura.

En este sentido destaca la estrategia de la Comisión Europea como un ejemplo positivo. La institución ha marcado un objetivo de alcanzar un 55 por ciento de reducción de emisiones en 2030 y para ello ha presentado en paralelo el paquete “Fit for 55”, compuesto por más de 11 textos legislativos con medidas interrelacionadas y complementarias.

«Este esquema de coherencia entre estrategia y regulación es lo que necesitamos las empresas para dirigir nuestras inversiones, y el que necesitan nuestros inversores para apostar por nosotros», señala.

Particularmente en el caso de las empresas energéticas, «el éxito del proceso de transición energética dependerá en gran medida de la coordinación que se logre entre los planes de acción de las distintas compañías y la estrategia de la Comisión Europea y los distintos países», puntualiza.

«Esta coordinación permitirá que se acometa el proceso del modo más ágil y rápido posible pero asegurando al mismo tiempo que en ningún momento se pone en riesgo la garantía de suministro», insiste.

Banco Sabadell

En su rol de entidad financiera, Banco Sabadell ha orientado su actividad, organización y procesos, con el propósito de contribuir de manera firme a la sostenibilidad y la lucha contra el cambio climático, y ha integrado, para ello, en su estrategia y modelo de negocio, marcos de referencia como, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

A través de su Plan de Finanzas Sostenibles, en el que también destaca la gestión de riesgos climático, Banco Sabadell prioriza el acompañamiento a sus clientes en sus decisiones para la transición hacia la economía sostenible y ha establecido además de éste, otros tres pilares de actuación: facilitar a los inversores su contribución a la sostenibilidad, adaptar la organización al nuevo paradigma y contribuir a la transición hacia una sociedad sostenible.

A nivel institucional y con relación a los compromisos medioambientales, Banco Sabadell forma parte de:

  • Net-Zero Banking Alliance promovida por la Iniciativa Financiera del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEPFI), con el compromiso de que todas sus carteras de crédito y de inversión sean neutras en emisiones netas de gases de efecto invernadero en 2050 como fecha límite, en línea con los objetivos más ambiciosos del Acuerdo de París.
  • El Compromiso Colectivo de Acción Climática (CCCA) para la reducción de la huella de carbono conjuntamente con AEB, CECA e ICO
  • Es firmante signatario de los Principios de Banca Responsable promovida por la Iniciativa Financiera del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEPFI).
  • Se adhiere a la Task Force on Climate-Related Financial Disclosure (TCFD), como modelo a seguir para reportar los riesgos y oportunidades asociados con la evolución climática.
Ana Ribalta, directora general adjunta y directora de sostenibilidad de Banco Sabadell

El banco, asimismo, para contribuir a la descarbonización a través de su actividad, ha creado una guía de elegibilidad interna para definir las actividades de financiación sostenible en todo el grupo. «Por otra parte, el banco está trabajando en la fijación para 2022 de las sendas de descarbonización de los sectores más intensivos en carbono», avanza.

Respecto al papel de la regulación, desde el Sabadell reconocen que, para el sector financiero, es necesaria.

«El sector privado tiene un importante rol que jugar en la canalización de recursos para financiar la transición a una economía sostenible, ya que el sector público no tiene capacidad para hacer frente a los 330.000 millones de euros anuales necesarios para acometer la transición ecológica en la UE», avanza.

«Para incentivar la participación del sector financiero, es importante que el marco regulatorio sea claro y consistente», concluye el banco del IBEX.

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