Bankinter descarta vetar créditos por causas climáticas

Bankinter descarta limitar el acceso al crédito a los sectores más contaminantes o ‘marrones’, a pesar de su reciente integración en la Net Zero Banking Alliance (NZBA).

Las entidades financieras integrantes de este grupo están obligadas a presentar objetivos a corto plazo en lo que a descarbonización de su cartera se refiere, con el objetivo de convertirla en cero emisiones en 2050.

Por el momento, Bankinter, que presentó este jueves sus resultados del tercer trimestre, ha preferido no adelantar ningún compromiso concreto -cuenta con un plazo de adaptación-, pero sí ha dejado claro que su intención no es cerrar el acceso al crédito a ningún cliente.

«El objetivo no es reducir la financiación, sino que la transición se realice en los plazos establecidos», explicaron María Dolores Dancausa, consejera delegada del banco, y Jacobo Díaz, director financiero, durante la presentación de sus cifras trimestrales. «Lo que queremos asegurar es que ellos (los clientes) se van adaptando», insistieron durante la presentación.

Bankinter es neutro en carbono en sus propias operaciones

Con la integración en este grupo, Bankinter se compromete a trazar una hoja de ruta en base a criterios científicos, para alcanzar las cero emisiones en 2050. Este compromiso afecta a toda su cartera –scope 3-. Por ahora sería cero emisiones en lo que se refiere a sus propias actividades -scope 1 y scope 2-, según ha explicado María Dolores Dancausa.

El Banco Santander o BBVA, que son miembros fundadores de NZBA, ya han establecido unos criterios concretos respecto al carbón, y se espera que presenten pronto una hoja de ruta ampliada, que afecte a otras industrias.

No obstante, su argumentación es muy similar a la que defendieron este jueves los ejecutivos de Bankinter: la banca lo que pretende es «acompañar» la transformación energética de las compañías que financian.

El sector financiero está inmerso en una gran presión por parte del mercado, que les recrimina que sigan siendo grandes financiadores de las empresas de activos fósiles.

Bankinter prefirió no precisar durante la presentación de resultados del peso concreto de los créditos «marrones» en su cartera, explicando que están analizando ahora mismo todos sus datos de cara al test de estrés climático que realizará el Banco Central Europeo (BCE) el año que viene. Esta misma semana ha presentado todos sus requisitos técnicos.

Los tres pilares en la ESG

Dancausa quiso resaltar los esfuerzos del banco por reforzar las tres líneas de trabajo que engloban la ESG. En materia medioambiental, además de su integración en la NZBA, también quiso destacar sus esfuerzos en criterios social y de gobernanza.

Dancausa reivindicó tanto el liderazgo en diversidad de género, como la larga relación del banco con la sostenibilidad; un temática en el banco lleva muchos años «trabajando», según destacó la consejera delegada, que también incidió en la presencia de la entidad en los principales índices de sostenibilidad de las bolsas mundiales.

Este año, el banco ha dado vida a la creación de una comisión específica en el consejo, denominada Comisión de Nombramientos, Sostenibilidad y Gobierno Corporativo y que está presidida por la consejera independiente Cristina García-Peri Álvarez.

Hasta su puesta en marcha, Bankinter contaba con un comité de sostenibilidad, que reportaba a la anterior Comisión de Nombramientos y Gobierno Corporativo, y que lideraba el presidente de la entidad, Pedro Herrero.

Nuevo plan de sostenibilidad

Bankinter también ha adelantado que presentará un nuevo plan de sostenibilidad, que hará público próximamente. Según avanzó Jacobo Díaz será una estrategia trianual. Lo que no quiso desvelar es cuáles serían las líneas maestras de esa nueva hoja de ruta.

A nivel de negocio, los temas medioambientales ya están teniendo un impacto. Dancausa recordó que se han firmado varios acuerdos para financiar proyectos de hidrógeno verde, por un total de 800 millones y que se han lanzado ‘project finance’ de renovables por 347 millones.

La entidad también destaca la sostenibilidad de otras áreas de negocio, como la gestión de activos. No obstante, en ella, la representatividad de los fondos de terceros es mucho más elevada que la propia (68,1 frente a 5.672 millones de terceros).

Esta diferencia, según explicó el director financiero, se debe a la larga tradición en arquitectura abierta del banco e insistió en que su cartera de fondos sostenibles propios está creciendo.