Apenas cinco de las 300 empresas mundiales comprometidas con el uso exclusivo de energía renovable son españolas

BBVA, Caixabank, Coca-Cola European Partners, Cajamar y Telefónica son los pocos representantes españoles dentro de la iniciativa global RE100

Una iniciativa para impulsar que las empresas aceleren su transición climática y alcanzar el uso de energía 100% renovable donde, de momento, de sus más de 300 integrantes solo hay cinco compañías españolas.

Se trata de RE100, una alianza corporativa global en la que están presentes multinacionales de todos los sectores, desde las estadounidenses Apple, Google o Facebook, farmacéuticas como AstraZeneca o Novartis, firmas financieras como Goldman Sachs o vinculadas al ‘retail’ de lujo, como Chanel.

Y, en ese ‘lobby’, solo figuran cinco empresas con sede en España. Se trata de tres entidades financieras, BBVA y CaixaBank (también estaba presente Bankia) y la Cooperativa Cajamar; la embotelladora de refrescos Coca-Cola European Partners; y la operadora de telecomunicaciones Telefónica

Así lo recoge el lobby enfocado en la transición energética, que forma parte de Climate Group y que colabora con CDP, firma que acaba de analizar la exposición al riesgo climático del sector financiero.

Básicamente, RE100 es una alianza de empresas de diferentes sectores que echó a andar hace siete años en la Climate Week celebrada en Nueva York en 2014 y que no pone el foco en la transición energética de un sector en concreto, sino en dar respaldo y altavoz a aquellas corporaciones que aspiran a acelerar en el uso renovable con la meta de conseguir las cero emisiones contaminantes antes de 2050

De esta forma, buscan ahondar en sus objetivos renovables, ganar visibilidad sostenible en las sociedades en las que operan e instar a las administraciones públicas a que faciliten esa transición energética ‘verde’ del sector empresarial.

Reducida presencia española y primacía estadounidense

En cuanto al peso relativo en el ‘lobby’ RE100 de las citadas cinco empresas españolas, la firma desglosa que está por detrás, por ejemplo, de las 11 compañías francesas, de las 11 alemanas o las 13 suizas. Sin embargo, indica, el consumo de energía renovable en España ya es superior al de cada uno de estos tres países. 

Eso sí, hay que tener en cuenta que se trata de una asociación donde prima la presencia estadounidense, con casi 80 compañías que suman un consumo eléctrico de más de 35 millones de MWh; frente a los 2,5 millones que el ‘lobby’ atribuye a España.

Además, RE100 registra cuáles son las metas que se han ido poniendo cada una de las empresas integrantes. 

En el caso de las cinco españolas, señala que BBVA se ha comprometido a usar fuentes energéticas 100% renovables al final de la presente década. Caixabank, a lograrlo en 2040. 

Mientras, el Grupo Cooperativo Cajamar tiene como objetivo obtener electricidad renovable para toda su operativa para este 2021 y Telefónica a alimentarse de fuentes renovables en todos los países en los que opera en 2030. 

Los compromisos que se exigen a los firmantes

Para formar parte de RE100 las compañías tiene que marcarse dos objetivos. Básicamente, lograr que el 100% de las electricidad con la que operan, a escala global, sea de origen renovable en 2050. Bien a través de su compra a comercializadoras con contratos a largo plazo o producción propia (plantas fotovoltaicas, eólicas…).

Además, deben marcarse una meta intermedia, bien un 60% de energía renovable en 2030; bien un 90% en 2040. 

RE100 indica que el año promedio de las empresas integrantes en la iniciativa es 2028; y que las europeas y las estadounidenses se han marcado metas más a corto plazo. En esta alianza global figura media docena de multinacionales chinas y casi 40 con sede en Japón, el segundo país con mayor representación.

Otro de los compromisos pasa por realizar un ‘reporting’ anual de la evolución. En el último correspondiente a 2020, RE100 indica que, en España -como en Reino Unido o en Suecia- la mayor parte de la energía renovable que consumen las empresas asociadas está producida dentro del país, mientras en otros mercados como Holanda, Finlandia o Francia procede de operaciones transnacionales con otros socios europeos. 

El último año, asume el ‘lobby’ en el citado informe, ha sido diferente, en cuanto a evolución, por la caída global de demanda energética fruto de la pandemia de coronavirus. Sin embargo, recalca que los compromisos por parte de las empresas, en cuanto a fechas, se han mantenido y que más del 40% de la energía consumida por las compañías integrantes ya procedía de fuentes renovables

Además, el informe del pasado ejercicio pone el foco en los motivos que llevan a las empresas a acelerar su transición hacia la energía verde.

Prácticamente la mayoría lo vincula a los compromisos de reducción de las emisiones de gases con efecto invernadero y a su estrategia de sostenibilidad (casi un 99%). Sin embargo, hay un 70% que también lo vincula a la búsqueda de menores costes.

En cambio, apuntan que habrá mercados donde sea más complicado conseguir las metas, por el menor desarrollo actual de la energía menos contaminante. Entre ellos, menciona Argentina, Australia, Rusia, Corea o Taiwan.

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